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La Opinión: Sí se puede!, gritan los jóvenes

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Si César E. Chávez hubiese escuchado ayer cómo cientos de jóvenes gritaban a todo pulmón la frase que él dejó estampada en toda una generación sabría que no se equivocó cuando en sus marchas, sus luchas, sus boicots para defender los derechos civiles y laborales de los trabajadores del campo y de los inmigrantes en general, aseguraba a sus seguidores que ¡sí se puede!.

¡Sí se puede!, ¡sí se puede! se repitió ayer una y otra vez durante un par de horas primero en la Calle Olvera y, después, en la caminata que se realizó en su memoria para conmemorar tanto la fecha de su natalicio — estaría cumpliendo 82 años — como la promulgación de un día feriado estatal en su honor nueve años atrás.

Dirigentes sindicales, celebridades, políticos, líderes religiosos, familias completas, estudiantes participaron en este evento cuyo objetivo fue crear conciencia entre los jóvenes del mensaje de no violencia, justicia social y servicios al prójimo que Chávez dejó como legado.

Arturo Rodríguez, presidente del Sindicato de Trabajadores Agrícolas (UFW), que César Chávez fundó junto con la activista Dolores Huerta en 1962, manifestó que el mensaje de unidad que el líder de los campesinos dejó es básicamente de unidad y justicia.

"El mayor tributo a César Chávez son los miles de jóvenes que marchan para mostrar su compromiso de seguir ese legado", afirmó Rodríguez.

Dolores Huerta, así como la presidenta de la Asamblea, Karen Bass y el congresista demócrata de Los Ángeles, Xavier Becerra, asistieron al evento.

Ayer, como antes lo hizo Chávez, la marcha que recorrió una ruta de tres kilómetros a través de la histórica Calle Olvera y el centro de Los Ángeles antes de regresar a la Plaza Olvera, resaltó la importancia de la no violencia y el respecto para los trabajadores agrícolas y los trabajadores en general.

Aún entre jóvenes como Isaías Robles, de 19 años, estudiante del Colegio Comunitario de Pasadena, Chávez representa un líder a seguir por su trabajo y sus logros.

"Estuve en la marcha porque porque es una forma de rendirle tributo y una forma de mantener vivo su menaje", indicó el joven vistiendo una camiseta con el rostro de Chávez. El hizo una huelga de hambre durante un mes para mostrarle a los latinos que sí se puede, para llamar la atención a los peligrosos pesticidas que se usan el campo poniendo en peligro la salud de los trabajadores".

Entre los patrocinadores del evento se incluyó al alcalde Antonio Villaraigosa y al concejal José Huizar.

En marcha caminaron codo a codo latinos, afroamericanos, asiáticos y anglosajones todos unidos bajo la ideología de Chávez. Ahí se demandó una reforma migratoria para los inmigrantes, igualdad en los derechos civiles para la comunidad gay, mejor calidad de educación para los estudiantes de las minorías, protección de los derechos laborales de quienes trabajan en el campo, justicia social, entre otros temas.