Declaración del Presidente sobre la Muerte de Helen Chávez
Por 88 años, Helen Chávez fue una fuerza silenciosa que dejó un legado que resonará por generaciones. Al lado de su esposo, César, dedicó su vida a organizar campesinos en California y en otras partes del país, luchando por salarios más altos, mejores condiciones laborales y un futuro más prometedor: La Causa. Ella manejó las finanzas de su sindicato, preparó comidas, marchó en huelgas y protestas e incluso fue arrestada por sus acciones. Todo esto porque ella creía en la dignidad de los campesinos de Estados Unidos; hombres y mujeres con quienes trabajó en el campo al mismo tiempo que criaba ocho hijos y ayudaba a liderar un movimiento.
Yo tuve el grandioso privilegio de conocer a Helen cuando designé la casa en la que ella y César vivieron por tanto tiempo como el Monumento Nacional de César E. Chávez. Michelle y yo enviamos nuestras condolencias a sus hijos, nietos y bisnietos, incluyendo a su nieta Julie Chávez Rodríguez, un miembro de confianza de nuestro equipo de la Casa Blanca. Nos unimos a ellos en la celebración de una vida bien vivida, una vida que comprueba que quien aman a este país puede cambiarlo. Sí se puede.